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LaMima

Las manos

- DE OTRAS VIDAS
Las manos

Si hay algo en mi hija que me produce una ternura sin límites, son sus manos.

He llegado al extremo, y que nadie se ofenda, de observar con un respingo los dedos "larguiruchos" de los niños recién nacidos que voy viendo. Me resultan extraños...como sarmientillos… que tonta.

Seguramente por eso la otra noche, cuando Blanca nos dejó entre sus fotos de facebook esta imagen de la mano de Angel, me dio un vuelco el cuerpo. Un vuelco cálido, no sé si podría explicarlo.

Volví a recordar aquello de Patus "...tantos años llevándola de la mano al cole, a pasear, a cruzar las calles, a mirar vidrieras, a subir al tobogán.... parece que han hecho una huella en mi mano que ahora añora su manito suave, pequeña, gordita...."  y pensé: bueno, nosotras podremos abarcarlas más tiempo.

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Menudo consuelo.

 

(Uno de los rasgos característicos de las personas con acondroplasia es la llamada "mano en tridente". Sus manos son pequeñas, regordetas, con todos los dedos de la misma longitud y en ellas existe una separación entre el dedo corazón y el anular que les confiere un aspecto peculiar. Esta circunstancia suele dificultar a nuestros niños la adquisición de los patrones adecuados de motricidad fina , pero nos regala otras cosas.....................)

7 comentarios

Lamia -

Aunque el mío esta hecho un hombretón, no hay nada comparable al placer que me produce envolver su mano con la mía cuando acaba de conciliar el sueño y se mantiene en ese duermevela en el que ya no es consciente pero sus sentidos aún permanecen alerta. Siento como responde a mi apretón y eso me ayuda... Mucho.

Ybris -

Quienes seguimos la temprana marcha de Patus con un nudo en la garganta sentimos ahora una emoción sin límites por tus palabras y las suyas.
Y más aún quienes sabemos también de las manos de Ainhoa y conservamos sus huellas en las nuestras.
Huellas mucho más importantes por su impacto que por su tamaño.
Ese impacto y su recuerdo siempre cabrá en las nuestras

Un beso emocionado, Inma.

patri -

Pues a mi las manitas me encantan... pero esos mofletes... qué ternura! Y qué foto tan bonita. Y a mi de tu hija es que me gusta TODO, maja, que aún me tiemblan las piernas del abrazote que me dió el otro día. Besazos

zerogluten -

Pues a mi me pasa lo mismo. Siempre ando besando las manos de mis hijos, pero si te suelen parecer sarmientos con las de Martín hubieras alucinado. Nació muy largo y sus manos impresionaban de lo largos y delgados que tenía los dedos. Sigue teniendo manos grandes para su edad.
Me encanta la foto. A mi también me inspira ternura.
Besitos sin gluten

Inde -

Ay, aquel texto de Patus...

Cuántas veces me acuerdo de él cuando llevo a mis hijos de la mano. (Aunque algunas veces más parece que llevas cogida una culebrilla en vez de una manica; que lo suyo suele ser querer soltarse...)

Un beso para cada dedico de las manos de Ainhoa.

Rosa. -

A mí también me encantan las manos. Tienes razón, dan mucha ternura... el otro día me "presentaron" a mi prima recién nacida y lo primero que hice fue cogerle la mano. Disfruta de las de Ainhoa, guapa.
Besos.
Rosa.

Elena -

Manos y pies son partes del cuerpo que dicen de nosotros... a tí te pierden las manos de Ainhora, a mí los pies de los míos. Acariciar, besar, tocar, admirar...no dejes de hacerlo, seguro a Ainhoa le encanta. un beso.