CARMEN ALONSO
El congreso de Gijón empezó de forma muy especial.
En el acto de inauguración, la primera intervención fue de Carmen Alonso, coordinadora de la Fundación Alpe. Como era de esperar en una mujer de su talla, no leyó un discurso pomposo lleno de formalismos. No, ella no es así.
Comenzó agradeciendo, correcta, a los intervinientes su participación para, a renglón seguido, subrayar que Yago, su hijo, recién elongado de húmeros (paseaba por el palacio de congresos con las fijaciones en los brazos como quien lleva un piercing) era quien más había dado de sí para ese evento: había cedido a su madre. Tenía razón.
No os podéis imaginar la deuda que tenemos los padres de niños con acondroplasia con esta mujer. Ella es el alma de la Fundación Alpe. Siempre está al otro lado del teléfono, siempre encuentra la forma de ayudarte, siempre se ríe..
Cuando viajamos a Gijón por primera vez, hace casi dos años, nos preparó una cena en su propia casa allí, con Yago y Nacho, su marido, como si nos conociese de toda la vida. Me sentí como quien visita a un amigo de los de verdad.
Nunca encontraré la forma de agradecerle lo suficiente el calor, la confianza, la complicidad, la alegría con que nos recibió. No esperaba eso, esa implicación, esa comprensión tan inmensa.. y desde luego reconozco que me dió la fuerza que necesitaba para, como dice ella, "levantar la cabeza y ponerme en marcha".
Me gustaría, aún se lo pediré, colgar aquí algun párrafo de ese discurso. Dijo cosas muy ciertas ("cuando un niño diferente viene al mundo, todo tiembla") que, sobre todo los padres que estábamos allí, comprendimos y acompañamos. Hubo realidad, y cariño en un discurso formal. Humanidad. Esa es mi Carmen.
Os hablaré mas de ella cuando sepa poner en palabras lo que significa una persona así. Mientras tanto deciros que, en ese acto, la Secretaria de Estado de Asuntos Sociales, Doña Amparo Valcárce anunció que la Fundación Alpe había sido galardonada con la Medalla de Oro a la Orden Civil de la Solidaridad que concede el Ministerio de Trabajo.
Carmen, al oirlo, se puso granate. Todos nos levantamos a aplaudir como locos y ella se puso en pie sin poder reprimir las lágrimas. Qué a gusto lloré.
Dicen que será la propia Reina Doña Sofía quien le entregue el premio. Espero que sepa estar a su altura..., la reina claro.
(La foto es de nuestra visita a Gijón en mayo de este año. Son Carmen y Ainhoa..trabajando)
4 comentarios
lamima -
patus -
Un abrazo
unjubilado -
En todas la fotos he visto a Ainhoa, sonriendo, debe de ser un encanto de niña y debe de ser muy reconfortante estar con ella.
Un abrazo
Paula -
lejano mundo el que me acercas, tan humano, tan real
Un besazo