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LaMima

Una fiesta

Una fiesta

Ha llegado el momento.

Nuestro buzón lleva días lleno de catálogos con niñ@s guapísimos vestidos de Sissí o de Capitán-chorreras, y con megamagníficas  Ps3,  XBOX, PSP, H, I, J, K .. y toda esa caterva de chismes demoníacos absorbe cocos.

La cosa es que yo empecé por no confirmarme, me casé “por lo criminal” y por pura coherencia decidí no bautizar a mis hijos: me daba vergüenza, me parecía una falta de respeto hacia los verdaderos creyentes.

Daniel nunca ha asistido a clase de religión. Una vez me contó muy serio que el bebé del Belén de Navidades era hijo de un señor al que los romanos mataron en una cruz. “Si, como ese que se ve en las procesiones.”

Si lo tendrá asumido que el otro día, paseando por Villanúa, cuando vimos la iglesia abierta y le propuse entrar (atea soy un rato pero reconozco que me gusta admirar los templos, oye) me dijo:

.. No, que yo no puedo.. Soy de alternativa…

¡Chupate esa!.

Pues eso, que no tengo intención de que comulgue, y él tampoco dice nada. Le he ahorrado 2 años de “apasionante” catequesis como actividad extraescolar y este año verá como sus compañeros de clase hacen la comunión y él no…pero eso sí, le vamos a hacer una fiesta. Una no-comunión, digamos.

Nada de las pasadas que leo por ahí (y aún me parece que se quedan cortos), que cada día nos vamos más del tiesto me parece a mí sino una fiestilla sorpresa llena de cariño, con regalos moderados, para recordarle que le queremos y, bueno sí, para que no se sienta menos que nadie.

Pues eso, que ¡¡allá vamos!!

6 comentarios

inde -

Bueno, hermosa, qué bien que te me adelantas: ya me explicarás punto por punto cómo has organizado la fiesta, para cuando me toque a mí.
De todos modos, aunque fuéramos creyentes no sé si me animaría al fiestorro éste de la Primera Comunión: es tan marciano que me provoca rechazo. Hay colegios que piden que los niños lleven todos el mismo traje, para evitar en cierto modo las pepadas y los dispendios estúpidos, y el yo soy más que tú; y llegan los padres y compran dos trajes, uno el que manda el colegio y otro tipo sissí y capitán chorreras (¡qué buena definición!) para el banquete. O la gente tiene dinero que no sabe dónde gastarlo o somos estúpidos definitivos de remate.
Un abrazo bien grande para Daniel y que sea una fiesta magnífica.

Isabel -

"Soy de alternativa", muy bueno!
Orientar a nuestros hijos en lo que nosotros pensamos mejor para ellos, creo que es lo mas correcto. Y enseñarles a respetar a todos, a los de Alternativa y a los que no lo son, también.
En esto, como en todo en la vida, lo importante es el respeto.
Un besico, Inma.

almena -

jajajajaaa
me encanta su respuesta cargada de lógica.
Cómo son los niños ¿eh?
boquiabiertos nos dejan
:)

Un beso!

Luisa -

¡De alternativa! ¡Enooormeeee! ¡Un genio!
Yo también soy de alternativa, en casi todo. En ésto de la religión (cualsequiera) y de los festorros adyacentes, alternativissssimmaa.
Me parece fantástico lo de la fiesta sorpresa. Mucho más divertido que lo otro. Va a poder presumir de veras: de familia chachi, de cariño, de diversión... Un besazo al alternativo, y a toda la familia alternativa;)

unjubilado -

Observo que eres muy coherente con tus principios. Siempre he considerado una aberración obligar, por seguir la tradición a que los niños reciban los tres primeros sacramentos. Cuando sean mayores y de verdad estén convencidos los pueden recibir en cualquier momento.
Seguro que en la fiestecilla os lo pasáis mejor que en la "fiesta, celebración".
Besitos

Estrella de Mar -

"No, que yo no puedo...Soy de alternativa"...GENIAL..los niños es que son taaan inocentes...y tan coherentes en el fondo..

Estoy segura de que disfrutará mucho más de la fiestecilla sorpresa que si le preparáseis una mini-boda de esas en las que se han convertido las comuniones..con sus listas de comunión y todo.arggggg