Me llamo Inma y vivo en Zaragoza.
En 2004 nació mi segunda hija, Ainhoa, portando la mutación genética que origina la acondroplasia (enanismo óseo).
Su llegada revolucionó mi vida hasta el punto de necesitar una válvula de escape; un lugar donde completar todos los sentimientos que bullen en mí y a mi alrededor. Donde observar la vida desde sus múltiples ángulos.
Este es, de momento, ese lugar: desde aquí voy pensando, aprendiendo y también(creo)enseñando algo.